martes, 6 de mayo de 2014

Mercadotecnia vs la mujer y bioética



En cuanto a la ética hacia la mujer y la bioética, la mercadotecnia ha tenido bastantes controversias relacionadas a este tema. Esto se debe a que la mercadotecnia ha utilizado la imagen femenina desde sus comienzos para hacer publicidad con ella, también se hace uso de la imagen masculina pero no llega a la forma excesiva en que se hace con la mujer aunque es igual de indignante, ya sea porque nos recuerda al hogar, nos da bienestar, confianza o simplemente porque nos atrae su cuerpo. Y justo aquí es donde entra dicha controversia, pues los críticos aseguran que la publicidad está llena de insinuaciones sexuales, especialmente de mujeres, por lo que se le cuestiona a la mercadotecnia muchas veces si simplemente está utilizando a la mujer como un objeto para vender, lo cual muchas de las veces suele ser cierto.

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Pero también el problema que se encuentra es que la televisión, las revistas, los espectaculares, los folletos, los videos musicales, las pasarelas, las películas, los restaurantes, incluso los juguetes; no muestran a cualquier mujer, siempre son mujeres bellas y con cuerpos perfectos totalmente llenos de photoshop y alejados de la realidad y de cómo luce una mujer “normal” porque sabemos que ninguna mujer se ve así en la vida real, pero aún así crean una mentalidad de cómo es que una mujer debe de verse y que todo lo que está fuera de esa categoría está mal, o es repugnante o incluso hasta inhumano y anormal, dejando a un lado toda la demás belleza que existe entre las mujeres y haciendo que prácticamente toda las mujeres se sientan inseguras por el modo en que se ven físicamente; claro que estas estrategias funcionan para vender pues las mujeres comprarán el producto intentando verse como la mujer que lo está anunciando, y los hombres lo harán con el deseo de poder obtener una mujer como aquella o incluso transformar a su pareja, familia o conocida. Pero hasta que punto es correcto humillar a todas las mujeres que no poseen un cuerpo de revista, ni la piel más blanca, suave y libre de manchas o de problemas que todas las mujeres tenemos como la celulitis o las varices, ni la ropa más extravagante y costosa que existe, pero que si tienen la necesidad de tener a un hombre atractivo y musculoso a su lado para realmente sentirse mujeres valiosas, ¿hasta donde todo esto es correcto para simplemente vender? ¿hasta donde voy a modificar la misma naturaleza humana hasta que sea "perfecta"?
    
Además, estas mujeres perfectas que aparecen en los anuncios o incluso en los juguetes (vemos mucho la polémica con las muñecas Barbie) por lo general aparecen en posiciones dominantes donde la mujer es el centro de fuerza y belleza, pero también existe publicidad en la que la mujer se muestra sumisa como siempre se piensa que lo ha sido, aunque no lo muestren explícitamente está claro que ahí se encuentra cierta debilidad especialmente ante el sexo masculino. Incluso en épocas pasadas o hasta en pleno siglo XXI varios afiches de productos se basaban en mantener a la mujer sumisa, con una única utilidad que es trabajar en el hogar, satisfacer al hombre sexualmente, cuidar a los niños o hacer cualquier cosa que el hombre no estuviera dispuesto a hacer,  mientras el hombre salía a divertirse y se ganaba la vida, muchas veces pintando a la mujer como si fuera una clase de ser inútil o de cierta forma estúpido hasta que llega su marido o incluso hasta una máquina exclusivamente para sexo. 


Así que esa es la parte problemática, encontrar hasta donde es ético y correcto utilizar la imagen femenina, e incluso muchas veces masculina, para vender un producto. Si es correcto hacerlo de forma en que lo hace Dove con su campaña de belleza o si es mejor hacerlo como Dolce & Gabbana. Si poner a la mujer como un objeto sexual, sometido y en muchas veces tonto, es la mejor forma de vender un producto porque es lo que la gente conoce y le parecerá atractivo, le causará gracia o porque esa imagen ejemplifica “perfectamente” el uso del producto o su objetivo principal. Porque no solo se trata de una simple imagen, es una imagen que de cierta forma nos seguirá por siempre, porque optaremos por adoptar esa ideología por moda, porque al día siguiente le voy a decir a mi amiga que no es una mujer completa ni digna de un hombre porque tiene unos kilos de más o porque su cara no es igual que a la de esa supermodelo que vi ayer en la televisión; o porque le diré a mis amigos que busquen una mujer como la de la revista en lugar de una real.

Ese problema es el que tiene la mercadotecnia con la ética de la mujer y la bioética, hasta que punto lo permitiremos, hasta que punto está bien ver mujeres desnudas en todos los espectaculares de la ciudad anunciando quien sabe que cosa y hasta que punto nosotros como clientes vamos a seguir comprando estos productos y permitir que se llegue a un punto en donde indirectamente todos somos una sociedad machista. 

jueves, 1 de mayo de 2014

La doctrina del shock

La doctrina del shock

El auge del capitalismo del desastre

En general el documental trata de como las políticas económicas de Milton Friedman y de la Escuela de Economía de Chicago alcanzaron importancia en países con modelos casi perfectos basados en el libre mercado a través de impactos en la psicología social a partir de desastres o contingencias, generando todo tipo de sentimientos y reacciones, logrando así hacer un cambio radical.

¿Cómo lo lograron? Simplemente tomaron oportunidades, como desastres naturales, crisis o guerras para lograr que le de algún modo se aprobaran ciertas normas, legislaciones o reformas.

¿Es buena o mala la terapia de shock? Todo parte de la psiquiatría, con experimentos que
generaron un gran debate pues a ojos de cualquiera parecería algo completamente inhumano pero para el psiquiatra Cameron y la CIA parecía un experimento bastante comprometedor basándose en que únicamente una crisis generaría un cambio real; donde lograron “resetear” a los pacientes a base de terribles torturas (que después aprovechó el gobierno para realizar mejores técnicas de tortura) pero la consecuencia fue una nueva personalidad desastrosa.

La tortura en este caso no se practicaba como simple sadismo, sino que bajo un contexto apropiado, podía realmente servir para lo que los investigadores se proponían, no funcionó tan bien como pensaban.

Es fácil suponer que después de este fracaso la terapia de shock simplemente se descartó, lo que sucedió fue que simplemente se transformó, en lugar de usar torturas ahora utilizaban el miedo que era prácticamente lo mismo pero dirigido a grandes masas y de una forma más discreta.

Entonces ahora, ¿cómo lograban que funcionara la terapia de shock? Como ahora se basaba en el miedo y en presionar a la gente, era mucho más sencillo hacer “simples” golpes de estado, como el de Chile en los años 70, pero aún se tenían que utilizar ciertas formas de tortura para poder lograr el objetivo de dicho golpe.

Es por esto que esta terapia seguía pareciendo una total masacre hacia el mundo externo, por lo que se debatió que sería menos terrible si se eliminara la violencia extrema contra la población (por lo menos eliminando la violencia que se ve claramente dirigida hacia dicha población por parte de las autoridades), para otros seguía pareciendo igual de inhumano pero eso no contuvo a los seguidores de esta doctrina.

Así, nació toda la parte de crear guerras entre países, crear reformas aparentemente buenas, aprovechando las crisis e incluso el carisma que pueden tener varios personajes públicos para ocultar todo aquél desastre; basándose siempre en el "factor sorpesa", el que nadie se espera. 

¿Lo que se logró fue bueno o malo? Todos estamos de acuerdo que lo que pasó en Chile, Bolivia, Polonia, Rusia, Sudáfrica y Asia fue realmente catastrófico y que realmente pensándolo todo desencadenó una serie de desastres, tal vez analizándolo más a fondo en muchas ocasiones representó algo bueno para dichos países o al menos para los que salieron beneficiados a partir de ello.

Entonces, ¿se puede decir que hay ganadores y perdedores? Lo que sabemos es que fue realmente provechoso para toda la máquina capitalista pues las empresas e incluso instituciones de gobierno aprendieron como sacarle provecho a todo tipo de desastres haciendo cosas tan simples como que más trabajadores ingresen a sus plantas de fabricación que a otros puestos fuera del mercado.

A pesar de que esto se veía bastante bien para el desarrollo de empresas y de la economía de ciertos países, no hay duda alguna que para gran parte del mundo representó una gran catástrofe, como fue la invasión y la consecuente guerra de Irak en 2003 la cual fue la terapia de shock más compleja e impresionante que cualquier otra, pues no solo movió a un país sino que fue algo que llegó a todo el mundo entero, que fue algo que empezó como darle “libertad” a un país tercermundista y terminó siendo simplemente economía y política para la máquina capitalista más grande de todas: Estados Unidos.


Si hablamos sobre quien gana y quien pierde, es bastante obvio que todos aquellos detrás de estos desastres pre-creados son los beneficiados, los que obtendrán grandes riquezas pero también todo el poder; y los que tienen la mala suerte de estar del otro lado son todos los que tendrán grandes pérdidas, no solamente económicas sino que también sociales, mentales y psicológicas, nadie vuelve a ser la misma persona después de un desastre y está claro que mucho menos una sociedad, un país entero volverá a ser el mismo después de tanto “shock”.

Lo que nunca sabremos es cuanto de esta terapia hemos recibido a través de tantos años, nunca sabremos cuanto ha cambiado nuestra personalidad y sociedad gracias al shock. Nadie sabe que tan lejos llegó esta doctrina y que tan lejos aún es capaz de llegar, a fin de cuentas nadie dijo que la crisis tenía que generar un cambio positivo, simplemente un cambio. 

"Mientras haya memoria, conciencia y resistencia, se estará abriendo un camino para un futuro diferente al que nos tienen preparado. De momento se está erosionando el monopolio de la verdad. El poder tiene los mecanismos para seguir gobernando contra los intereses de la mayoría. Pero no está siendo capaz de inocular su mentira en la sociedad. Por ahora dispone de impunidad, pero carece de hegemonía moral. Y esto, ya de por sí, simboliza toda una grieta en el tenebroso tratamiento de choque de la doctrina del shock." (Rodriguez, 2013)


Referencias
Klein, N. (Dirección). (2009). La doctrina del shock [Película].


Rodriguez, O. (1 de octubre de 2013). eldiario.es. Obtenido de La crisis como una excusa para la doctrina del shock: http://www.eldiario.es/zonacritica/crisis-excusa-doctrina-shock_6_181341879.html

sábado, 8 de marzo de 2014

El deber de la desobediencia civil


Desobediencia civil. Cuando mencionamos estas palabras inmediatamente pensamos en todo lo que podemos hacer mal según las leyes de la convivencia del Estado: cometer un delito, participar en protestas destructivas, negarse a participar en las actividades del Estado o a pagar los impuestos que nos corresponden; en su última instancia es no acatar una norma de la que se está obligado a cumplir.

Nunca pensaríamos que la desobediencia civil en realidad sirve para algo positivo en la sociedad, sin embargo esta no es la opinión de Henry David Thoureau; para este hombre la desobediencia civil tiene un fin en contra de los grandes y esclavistas gobiernos como lo es Estados Unidos, incluso se podría decir que para él la desobediencia civil proviene más de los gobernantes que de aquellos que están tras las rejas.

Thoureau, un escritor y filósofo revolucionario quien en su ensayo “El deber de la desobediencia civil” trata este tema desde un ángulo en el que vivimos en una sociedad sin sentido, lleno de injusticia y poca conciencia por parte de todos los ciudadanos. Por estas razones para él no existe ningún gobierno que sea “perfecto” y que funcione en base a los intereses y necesidades de la sociedad en lugar de la injusticia y deseo de poder y por esto ningún gobierno debería de tener derecho al poder sobre los ciudadanos como lo tiene actualmente.
 



“Nunca, como hoy, nos hizo menos falta de estado, así como nunca nos ha tiranizado tanto.” (Thoureau, 1948)

Es la frase que utiliza Thoureau para referirse a que estamos completamente controlados por un Estado al que no necesitamos pues somos personas que no deberían regirse por un gobierno que no existe para protegernos sino todo lo contrario; las personas deberían regirse por el hecho de ser personas, por su propia conciencia, pues este sería un mejor método de controlar a la sociedad, es decir, si el futuro de una sociedad, de un país, reside únicamente en los habitantes sin ningún otro representante, su conciencia sobre sus actos y los de los demás será más grande a que si se piensa que esta responsabilidad recae únicamente en los gobiernos. Sin embargo esto no sucede ya que el hombre carece de seguridad y confianza en sí mismo y en su propia raza; es por esto que el Estado funciona, porque existe gracias a esta inseguridad que genera miedo en cada uno de sus miembros, lo que los lleva a acatar cada una de sus órdenes. Si todos nos rigiéramos por esta conciencia humana muchos problemas se pudieron haber resuelto simplemente con pensar “esto está mal” en lugar de haberlo hecho con insultos, amenazas, disparos y golpes.

Nuestro estrés, trastornos, desesperación y falta de responsabilidad está marcada por estos acontecimientos anteriores; nunca la humanidad había estado tan devastada como lo está ahora y es porque creemos tener una responsabilidad demasiado grande para nosotros: cambiar al mundo. Desde pequeños nos implantan esta idea, esta ilusión de que podemos cambiar a toda la humanidad y vivimos creyendo que podemos hacerlo.

“En cambio de trabajar por la paz, tendríamos que empujar a los hombres a relajarse, a dejar  de trabajar; a tomárselo con calma, a soñar y a ociar, a perder el tiempo.” (Thoureau, 1948) Pero no, nos enseñan a vivir en el estrés, en la desesperación, pensando que algún día nuestro trabajo hará algo impactante que cambiará todo, pero no es así.

Existen millones de personas que piensan de esta forma, que se oponen a todo y sin embargo no hacen nada. Claro, piensan, dudan, se enfurecen, se entristecen 





y lamentan pero al final eso es lo único que hacen porque no los enseñaron a hacer otra cosa, porque tienen miedo del gobierno y piensan que es mejor quedarse con este mal que abrir la boca y generar uno peor, sin saber que las acciones son las que cambian las cosas, una revolución no empieza con pensamientos, empieza con acciones; acciones que van a hacer los que realmente están a cargo de la nación: los individuos, no el gobierno.

“No importa cuán pequeño pueda parecer el comienzo: lo que se hace bien, bien hecho queda para siempre. Pero nos gusta más hablar de ello: esa, decimos, es nuestra misión.” (Thoureau, 1948) No importa si comenzamos con 100 personas, al menos ya empezamos, porque en ese momento la minoría deja de ser una minoría y comienza a ser una revolución pacífica. Renunciar a todo lo que no estamos de acuerdo en lugar de seguirlo insatisfechamente, porque solo así se puede ver un cambio.

Pero esto nos ha llevado a abandonar nuestro lado humano, a quedarnos en las grandes ciudades, miserables, frustrados, buscando encontrar una salida de la misma trampa que nosotros nos impusimos llamada gobierno, el cual limita a los espíritus libres y creativos; no es una coincidencia que el día de hoy se estudien más carreras financieras que artísticas.

La única forma de ser realmente libres es haciendo que la máquina del gobierno se detenga, y eso se hace dejando de servir al mismo mal que nos condena; no es que el hombre pida una abolición del gobierno porque simplemente no es capaz de dejarlo, lo que pide es un mejor gobierno. Aprender a ser primero hombres y súbditos luego. Aprender a generar una conciencia, imaginación, creatividad, sentido de vivir y después servir a nuestro gobierno, pues de otra forma simplemente somos utilería para el Estado, dejamos de ser hombres pensantes y conscientes que se oponen a un cambio porque eso no es lo que les dictó el gobierno cuando comenzaron a desarrollarse y a razonar. Sabemos que cuando el gobierno ya no funciona es momento de actuar, pero no lo hacemos porque según nosotros “no es necesario”.

No es posible vivir en el gobierno pero tampoco vivir sin él. Simplemente porque “quien se da enteramente al prójimo es considerado por éste, inútil y egoísta; el que se da en parte sólo, es considerado bienhechor y filántropo.” (Thoureau, 1948).




Para concluir, el hombre está hecho para vivir en sociedad libremente por lo que debería bastar con su conciencia para gobernar a la nación, pero como este no es el caso, las personas deberíamos primero aprender a saber quién somos, para que estamos aquí, tener claros nuestros ideales y después ser parte del gobierno, de las leyes que dicta como normales y necesarias, para impedir caer en un ciclo con el que no estamos conformes pero no nos atrevemos a cambiar.  

“Si un hombre es libre de pensar, de soñar, de desear, lo que no es nunca por mucho tiempo lo que le parece ser, no hay reformadores ni gobiernos insensatos que puedan interrumpirle fatalmente.” (Thoureau, 1948)
Estamos en la búsqueda de un Estado perfecto sin darnos cuenta que dicho Estado no es el que está gobernado por los mejores políticos o economistas, sino que el mejor Estado va a ser el que reconozca al individuo como el poder superior pues solo así se puede garantizar la igualdad y justicia.

Un gobierno que no interfiera con el individuo y sus ideas, que no se aproveche de él, pero que lo motive a cumplir sus deberes como humano y ciudadano. Un Estado así, prepararía el camino hacia otro más perfecto.

Sin embargo aún estamos en la búsqueda de esta perfección, la cual no alcanzaremos simplemente con pensar en ella.

No debemos intentar ser como Thoreau, ni como Jesucristo, sino lo que en verdad somos en nuestra sociedad. Este es el mensaje de todo gran individuo, este es el significado exclusivo de ser individuo. Ser algo menos significa acercarse a nada.



Referencias

Pérez, E. A. (7 de marzo de 2014). Desobediencia civil. Obtenido de Pendiente de migración : http://pendientedemigracion.ucm.es/info/eurotheo/diccionario/D/desobediencia_civil.htm

Thoureau, H. D. (7 de Marzo de 2014). El deber de la desobediencia civil. Obtenido de blogspot.com: http://eticaunprocesodemaduracion.blogspot.mx/2014/02/referencias-para-realizar-ensayos.html#more



viernes, 21 de febrero de 2014

¿Es el patriotismo un simple invento?

¿Es el patriotismo un invento? Es una pregunta que realmente nunca me había planteado, siempre creí que ser patriota es algo con lo que se nacía pero nunca me detuve a pensar si el patriotismo podría ser un simple término inventado por los gobiernos hace años atrás, por lo que responder esta pregunta resulta algo bastante interesante de realizar, en este caso intentaré responderla desde una posición contraria a lo que plantea la pregunta; para hacerlo, plantearé preguntas como: ¿se extraña a un país o es a los amigos, a un barrio?, ¿Quién es patriota es un retrasado mental?, ¿el país son los amigos y tu gente? y ¿Cómo vas a ser patriota si uno se siente parte de poca gente?
Sería conveniente comenzar definiendo qué es la patria y el patriotismo.
Patria. Comunidad humana de carácter psicosocial unida por un sentimiento de afinidad, robustecido por una similitud étnica, un mismo suelo, tradición histórica y un lenguaje en común.  
Patriotismo. Pensamiento que vincula a un individuo con su patria. Es el sentimiento u orgullo que tiene un ser humano por la tierra natal o adoptiva a la que se siente ligado por unos determinados valores, cultura, historia y afectos. Tiene patriotismo el que consagra a la patria su hacienda, sus servicios y su existencia
Esto quiere decir que todos y cada cosa que nos caracteriza pertenece a la patria, pertenecemos a un país como éste nos pertenece a nosotros, claro que esta no es la misma definición que tenía hace miles de años, la patria comenzó siendo simplemente como la ciudad hasta extenderse hasta todo lo que involucra el día de hoy.

Considero que sería preciso comenzar el desarrollo de este texto con la siguiente cuestión:

Cuando reflexionamos sobre nuestro país, en este caso México, ¿cuáles son las primeras cosas que se nos vienen a la mente?


Respondiendo a la pregunta anterior, lo primero que pensamos son elementos que reconocemos como propios y nos identifican en el territorio mexicano y en el resto del mundo.

Esto se debe a que, como seres humanos y sociales, necesitamos convivir y para convivir necesitamos de la familia, la escuela, la comunidad y sobre todo al país pues es el que proporciona todo nuestro acervo cultural, creencias, costumbres, tradiciones, normas, valores, etc., por esta razón siempre tenemos una gran parte de nuestro país con nosotros, desde ahí estamos siendo patriotas porque de no serlo, no estaríamos aceptando ni apreciando lo que somos como individuos y como componentes de una sociedad.

Entonces, ¿se puede decir que el patriotismo es un invento?, la respuesta es claramente no por lo ya antes mencionado, no puedes inventar un sentimiento, un valor o una comunidad, incluso la persona que se dice ser menos patriota extraña a su país cuando se van lejos de él, pues el simple hecho de decir “soy mexicano” es ser patriota pues desde ese momento se siente ligado a dicho país de una forma en que no se siente hacia algún otro y está aceptando que le debe a ese país su existencia, que el país es parte de esta persona y de cierta forma valora todo lo que dicho país le ha dado, y es cuando se da cuenta que el patriotismo siempre está dentro del ser humano, no de una invención.

No se puede decir que sólo se extraña a los amigos y no al país pues aunque dejes al país acompañado de tus amigos y familia, en un momento vas a extrañar al país y todo lo que éste conlleva pues un país no es simplemente un pedazo de tierra, está conformado por características que definen a la identidad nacional y por la tanto a nosotros porque tenemos una historia con nuestro país que no tenemos con otro país aunque ya llevemos años viviendo en éste otro; también en aquí se argumenta que el país no son sólo tus amigos y tu gente, es un lugar que involucra toda una forma de vida y características especiales que lo diferencian de todos los demás países.

Por este argumento anterior, tampoco es posible decir que aquél que es patriota es un retrasado mental, este es un pensamiento que tiene una persona con cultura hegemónica, es decir, que tiene ideas de que una entidad es superior a otra lo que se puede dar por ideas del romanticismo que es exagerar las características, valores y elementos de otras culturas sin pensar en que también tiene partes negativas como todos los demás países; tal vez éstas personas que se refieren al patriota como un retrasado han perdido un sentido del patriotismo por tanta exposición a los conceptos hegemónicos y románticos, sin saber que incluso pertenecer al  lenguaje del país es ser patriota pues se relaciona con todo el país ya que en él están incluidos todos los símbolos, valores y formas de ver el mundo; por lo que, si todos los patriotas somos retrasados, entonces no existe una sola persona que no sea retrasada mental pues todos tenemos aunque sea un poco de patriotismo dentro de nosotros incluso desde una variable tan simple como el lenguaje.    

Finalmente, se suele argumentar que no existe el patriotismo porque dentro de un país, uno se siente parte de poca gente o de pocas tradiciones o creencias, esto no tiene que ser un impedimento para ser patriota pues aunque la persona se sienta que de cierta forma no pertenece o que solo lo hace a ciertas partes, el país es parte de esta persona incluso muy por debajo de ésta; de esta forma, la patria persiste aun cuando unos falten, lo que se refiere que aunque haya personas fuera del país o personas que no creen en el patriotismo, la patria va a seguir siéndolo porque todos somos patriotas incluso de la forma más simple.   

Para concluir, es importante considerar a la patria y al patriotismo en nuestras vidas pues no es solo el lugar en el que vivimos y nos rodea, también es todo el entorno en el que crecimos y nos formamos y es la razón por la cual somos de la forma en que somos, así como también lo que hace único a nuestro país de entre cientos.

Debemos tomar en cuenta que ser patriota no es simplemente cantar el himno nacional, ir a honores a la bandera o tener un respeto por el presidente, es algo que involucra muchos factores que son parte de nosotros y del país, tan simple como el lenguaje, simplemente muchas veces no lo vemos y no estamos conscientes de todo lo que valoramos a nuestra tierra por todo el contacto con culturas exteriores que hemos tenido desde pequeños que nos lleva a pensar que de todas las culturas, la nuestra es la menos rescatable y preguntarnos ¿por qué no me tocó nacer en Europa? ¿O Estados Unidos? ¿O al menos en África?

Debemos estar conscientes que aunque nuestro país tenga defectos, al igual que todos los demás por más perfectos que parezcan, es parte de nosotros y nosotros de él y gracias a esto somos únicos.

Y tú, ¿ahora si te sientes patriota?